martes, 19 de agosto de 2008

Vivir como respiramos

Las funciones básicas del organismo como son la respiración, los latidos del corazón, la reproducción de las células, el crecimiento de las uñas y el pelo y cientos de funciones mas que ocurren constantemente en nuestro cuerpo día y noche sin parar desde que nacimos (y así será hasta el día que dejemos de respirar), son denominadas funciones vitales y pertenecen a ese ámbito de la vida que operan de manera inconciente, fuera del control de nuestro plano mental, y lo que es mas interesante, estas funciones son realizadas sin ningún esfuerzo.

“Que curioso que la vida funcione de manera compleja, sin dificultad y que al mismo tiempo le demos tanto valor y poder al esfuerzo con que hacemos las cosas, como si de eso dependiera la vida”.

La vida es algo que nuestra mente no comprende, la vida “sucede”, “está”, “es” y “existe”, independiente de lo que pensemos o hagamos.

La vida, para nuestra mente, esta en el plano de lo que sub-entiende como milagroso o divino, y digo sub-entiende ya que no la entiende, siendo nuestra intuición espiritual la que le da sentido a nuestra existencia.

¿Donde quiero llegar?

Quiero reflexionar respecto a la no mente, a la simpleza de la vida y a la facilidad de existir.

¿Sufre la planta al crecer? …¿sufrirá al morir?... ¿Para quién florece la rosa?... ¿tiene remordimientos el león al matar para comer?... ¿se deprime el venado por la muerte de su cría?...¿se preocupa el ave por lo que va a comer mañana?... ¿se da cuenta el oso que es oso?... ¿se pregunta el mono si existe Dios?...¿se pondrán de acuerdo los peces del cardúmen para girar juntos al mismo tiempo?.... ¿le avisa el ave que va al frente de la bandada a la de atrás que esta cansada para el relevo?... ¿es malo el delfín porque mata para comer?...

Ciertamente las respuestas generan inmediatamente la distinción entre el reino animal y vegetal respecto al humano, donde al parecer, ser un humano implica necesariamente estar fuera de la “facilidad de la existencia”, o sea, estar fuera del reinado de la naturaleza, lo que nos pone en el reinado de la mente.

¿Podríamos vivir sin mente?... ciertamente que si, seríamos otra raza de animales viviendo nuestra existencia sin cuestionarnos la vida, pero… no es ahí donde quiero llegar, en ese punto no hay nada nuevo que agregar, somos una especie distinta y tenemos una mente compleja y alguna razón habrá para ello.

Donde quiero llegar es a reconocer nuestro lado “natural” de existir y a explorar la posibilidad de que podamos seguir pensando y al mismo tiempo dejarnos llevar por las fuerzas invisibles del universo que también son las fuerzas de la naturaleza, y por que no decirlo… son las fuerzas de Dios.

“Vivir como respiramos” es un desafío, porque eso implica “no preocuparnos”, “no tener miedo”, “no dramatizar”, “no estar ansioso”, “no victimizarnos”, “no ejercer poder sobre otros”, “no juzgar”, “no agredir”, no…, no…, no…

¿Será eso vivir?... ¿no será una lata vivir así?...¿se podrá?... ¿me estas hablando en serio?..

Si es una lata o no vivir en Paz, confiado en que las cosas ocurrirán de manera adecuada, que la abundancia es tener aquello que necesitas y que llegará de manera misteriosa día a día y que tus hijos también van a estar bien, dependerá de cuan dispuesto estés a probar una nueva alternativa de ver la vida, algo que nunca antes viste como una posibilidad pero que, si lo piensas con el corazón, intuitivamente sabes que existe.

Tu travesía es un velero en el medio del océano impulsada por el viento de la vida, no sabes si llegarás a un puerto o perecerás en el trayecto, pero tu elijes hacer el viaje temeroso y angustiado, remando desesperado para llegar mas rápido y perderte el paisaje o disfrutar el viaje confiado en que nada te faltará durante la travesía.

El único requisito para viajar confiado es vencer el miedo y la resistencia a dejar esa vieja energía que mantiene apegos con el drama de vivir, la necesidad de sufrir para obtener, la necesidad de que la vida sea un calvario para ganarte el cielo, la creencia de que las cosas deben costar para disfrutarlas, la creencia de que Dios te recompensará en otra vida si sufres en esta. En otras palabras, el único requisito es tener fe, pero “verdadera fe”, no una fe condicionada a que ocurra lo que nosotros caprichosamente queremos, y digo caprichosamente porque lo que vemos como “nuestras soluciones ideales” son tremendamente limitadas, arreglan aparentemente nuestro problema, pero en cambio las soluciones que nos da el universo, no solamente son adecuadas si no que además son tremendamente inteligentes y acertadas tanto para nosotros como para el resto de la coexistencia involucrada en ese problema.

Solo mira a tu alrededor y ve la “facilidad con que se da la vida”, la naturaleza florece, las cosas resultan de manera equilibrada, el pan de cada día siempre esta en la mesa, las deudas se pagan y siguen naciendo criaturas día a día. Solo observa el ciclo natural de la vida y fluye con él, verás que cada vez que quieres forzar la vida hacia lo antinatural (como oponerse a la muerte o querer que las cosas sean exactamente como tu quieres) vendrá el drama y la frustración, de manera que el desafío es buscar entender el flujo de la vida y el amor que hay en todo para dejarse llevar por ella en una actitud creativa y participativa en lugar de hacerlo de manera desafiante y demandante.

Ojo!! No estoy hablando de entregarse y dejar de “hacer” pensando en que la vida proveerá, porque si no siembras no cosechas.

Tienes que seguir haciendo lo que haces, lo que amas, lo que te mueve y te motiva, pero sin la dificultad que le pones a diario, sin esa carga emocional negativa, sin esa condición y autoexigencia con que quieres que las cosas sean, sino mas bien, dejar que aquello que haces te regale su recompensa natural y que estés dispuesto a amar lo que has sembrado.

Paradoja:
Traemos hijos al mundo… hermosas criaturas que solo nos traen bendiciones y amor, una sola sonrisa de ellos nos deja satisfechos, sin embargo, el miedo a no poder darles mañana lo que necesitan el miedo a que les suceda algo y el miedo a que sufran, nos impide amarlos en su esplendor cada día, y aquí cuestiono también la falta de fe. ¿por que vemos a nuestros hijos como si en ellos no estuviese también Dios cuidando de sus necesidades?

Nota:

Estos posteos están dirigidos a personas con un nivel de conciencia que les permite “resonar” con las ideas expuestas, no pretendo que estas palabras sean para “todos”, ya que hay personas que viven en una realidad social y cultural distinta donde estas palabras pueden no tener ningún sentido.

Gracias por la visita!

Si quieres que te informe cuando subo nuevos posteos escríbeme a alvaro@scaramelli.cl

www.innerlife.cl

5 comentarios:

Anónimo dijo...

hola álvaro, soy gabriela alcántara, actriz, de lima - perú. acabo de encontrar tu página casi por azar, en medio de una crisis de la edad; y me dio tanta paz y calma que pude al fin perdonar y ser libre.
qué bueno leerte y encontrarte.
quería cambiar y lo estoy haciendo.
gracias.

Anónimo dijo...

Hola Alvaro soy Cecy, por obra de dios encontre tu pagina, porque estaba pasando por un momento de nervios de pensar si se me puede olvidar respirar etc.. crisis de strees creo yo, y tus comentarios de verdad son fruto de vida, gracias por existir y escribir no dejes de hacerlo de verdad GRACIAS..porque me doy cuenta de que nos queremos complicar la existencia cuando dios nos la dio tan sencilla.,

Gloria Vera Pereda dijo...

Hola Alvaro, hace algún tiempo leo tus posteos a diario son lecciones de vida que me han ayudado mucho y cuando siento que estoy pensando o preocupandome de algo como antes vuelvo a leer y a enmendar camino, este es uno de mis posteos favoritos porque me enseñó a como vivir con FE y a encontrar un camino diferente, resonó en mi de una manera grandiosa cambiando mi rumbo y trayendome Paz. Eres un gran guía espiritual para muchas personas como yo. Gracias y bendiciones.

Gloria Vera Pereda dijo...

Hola Alvaro, hace algún tiempo leo tus posteos a diario son lecciones de vida que me han ayudado mucho y cuando siento que estoy pensando o preocupandome de algo como antes vuelvo a leer y a enmendar camino, este es uno de mis posteos favoritos porque me enseñó a como vivir con FE y a encontrar un camino diferente, resonó en mi de una manera grandiosa cambiando mi rumbo y trayendome Paz. Eres un gran guía espiritual para muchas personas como yo. Gracias y bendiciones.

Anónimo dijo...

Gracias por recorrer un camino y poner señales para guiarnos, gracias por describirlo tan bien
Desde aquí un abrazo y gracias!!!
Andrea M.